Hoy os traigo una de las más especiales que he hecho hasta ahora, un cubo de cerveza para el cumple de dos compañeros de trabajo. Cómo no, con quintos de cerveza de la tierra, de Estrella de Levante.
El interior de la tarta era de bizcocho de chocolate blanco con crema de chocolate blanco, una mezcla intensa pero muy suave y deliciosa. El exterior lo cubrí con fondant marmolado marrón y blanco texturizado, imitando madera vieja. Las botellas eran de RKT (krispies con nubes), con etiquetas comestibles personalizadas. Ah, ¡¡y los hielos!!, que eran de gelatina, dando una sensación increíble de realismo.
Un placer para los sentidos por fuera y por dentro.
