Si la tarta de Gin Tonic os pareció rica, esta tarta os aseguro que levantará pasiones. Dulce, cremosa, refrescante a más no poder, y con todo el sabor del mejor de los mojitos. En definitiva, una de las tartas más ricas y originales que podéis hacer, y nada difícil, por supuesto.
La foto es de la presentación tradicional en molde redondo, pero admite muchas variantes, claro. Podéis servirlo en pequeñas porciones individuales en pequeñas cápsulas de papel, o también usar vasos de chupito y poner la crema de queso y la gelatina, o directamente la gelatina. Es sencillamente espectacular el resultado.
Vamos con la receta. Llevará una base de galleta, un relleno de queso y una cobertura de mojito.
Ingredientes
Base
200 g de galletas de limón
50 g de mantequilla
Un chorro de ron
Relleno
100 ml de Ron
200 ml de Agua
100 g de Azúcar moreno
8-10 hojas de Hierbabuena
Ralladura y zumo de 3 Limas
1 sobre de Gelatina
300 g de Queso Philadephia (siempre mejor el normal que el light)
Cobertura
200 ml de Agua
50 g de Azúcar Moreno
1 sobre de Gelatina
250 ml de Mojito (lo venden en el super)
Colorante alimentario verde
PREPARACIÓN
Base
Triturar las galletas. Añadir la mantequilla hasta conseguir una masa uniforme. Repartir por toda la base, y echar un chorro de ron sobre ella.
Relleno
Poner a calentar el ron, el agua y el azúcar moreno, y llevar casi a ebullición. Incorporar la hierbabuena, el zumo y la ralladura de limas, y calentar durante 20 minutos. Enfriar y colar el líquido.
Añadir la gelatina y disolver completamente. Añadir el queso y mezclar bien. Echar la mezcla sobre la base, y enfriar en el frigorífico hasta que haya cuajado.
Cobertura
Calentar el agua y el azúcar moreno. Dejar hervir durante dos minutos. Añadir el mojito y mezclar. Dejar enfriar, y añadir un poco de colorante verde. Echar sobre la crema de queso, y meter en el frigorífico hasta que cuaje.
